Maldonado levanta con éxito su historia en la halterofilia

Por Rodrigo Navarro

María Maldonado ha hecho del levantamiento de pesas su pasión… desde muy pequeña. Sonríe, pero es reservada; eso sí, está muy comprometida con lograr sus anhelos y se abre paso entre las mejores de la disciplina en Guatemala.

Con tan solo 17 años, Maldonado comenzó a escribir su nombre en los libros de la historia del levantamiento de pesas, gracias a su gran actuación en los Juegos Olímpicos de la Juventud, Buenos Aires 2018, al colocarse dentro de las mejores 10 del mundo en la categoría de los 63 kilogramos.

La poseedora del  récord nacional juvenil de su categoría, hizo un espacio en su visita a la ciudad capital para compartir sus vivencias en una entrevista realizada en la Federación en la zona 5.

Con doble jornada de entrenamiento en el Complejo Deportivo de Quiché, de donde es originaria y donde reside, Maldonado se prepara de cinco a seis días de la semana para continuar con el legado que inició su madre, Claudia, en los años noventa.

Sus inicios en el deporte

Su historia empezó a trazarse desde muy pequeña, cuando en ocasiones acompañaba a su madre a los entrenamientos. Con el paso del tiempo se fue enamorando de la halterofilia y a los ocho empezó a competir en las categorías infantiles.

“Mi mamá me llevaba a sus entrenos cuando era seleccionada y desde niña influyó para que practicara el deporte. A los ocho años gané mis primeros juegos departamentales, pero después dejé de entrenar dos o tres años”,  expresó Maldonado.

Tres años después de esa pausa volvió al gimnasio, sin imaginar que la halterofilia se iba a convertir en parte de su vida, “A los 13 años empecé con el primer clasificatorio a los Juegos Deportivos Nacionales, gracias a Dios siempre obtuve los primeros lugares”, recordó sonriendo.

Su crecimiento en el deporte fue espectacular, al coronarse durante más de ocho veces como campeona en las justas juveniles más importantes del país, títulos que le valieron para formar parte de la selección de cadetes.

“Participar en los Juegos Nacionales fue muy importante en mi carrera, porque ahí es donde ven a los atletas que forman parte de la selección; por mis resultados me convocaron a los Juegos Centroamericanos en Nicaragua”, contó.

“La experiencia de participar en los Juegos Deportivos Centroamericanos del 2017 fue muy fuerte; me enfrenté a las mejores de la región en la categoría mayor y logré quedar dentro de las mejores cinco en la división de 75 kilos, esto me motivó mucho más”, dijo la atleta

Gracias a su buen resultado en el clasificatorio panamericano para los Juegos Olímpicos de la Juventud, en 2018, en Colombia, donde obtuvo el quinto lugar, la Federación Nacional recibió una carta de invitación para una atleta, la cual fue designada a María.

“Fue una experiencia muy impactante. Nunca me imaginé llegar tan lejos; fue una competencia que marcó mi vida y me motivó mucho más para lograr mi máximo anhelo, que es llegar a los Juegos Olímpicos”, comentó.

Apoyada por su familia, en especial su madre,  Maldonado se dedica al 100% en su preparación para cumplir sus próximos retos: ganar en mayo una medalla en el Panamericano sub 20 en Cuba y clasificar al mundial juvenil.

“Desde que me dedico de lleno al levantamiento de pesas  mi vida ha cambiado mucho; antes salía a molestar con mis amigos, ahora soy una persona más disciplinada y mucho más sana, es algo que me apasiona mucho y me ha inculcado muchos valores”, analizó.

“Llevar el nombre de Guatemala es una responsabilidad muy grande, pero muy linda, es representar a millones de personan que esperan que des lo mejor por tu país”, finalizó.

Descubriendo a Maria Maldonado